Independiente 2
Liga (Quito) 1Fredes te sacó la Liga
El Rojo había armado flor de fiesta en Avellaneda y la mano se complicaba, pero apareció Hernán Fredes, de excelente partido, para darle la clasificación a la final de la Sudamericana. Independiente eliminó al cuco ecuatoriano y definirá con Goiás.El Libertadores estaba a full incluso antes de empezar. Incluso cuando se veía que la marea Roja continuaba bañando sus costas. ¿Dónde va a entrar tanta gente? era la pregunta de muchos, pero poco importaba la respuesta. Fiesta, emoción, miedo, angustia y la pelota que comenzó a rodar para exacerbar los sentimientos. Mucha familia, mucho legado, los que estaban, los que alentaban desde una estrella, colgados. Porque seguro que desde el cielo también tuvieron que estar apretados para ver al Rey de Copas caminar con prestancia durante noventa minutos.
Esta vez no hubo nervios de parte de los jugadores, no pecaron de ansiosos y manejaron bien la pelota ante un rival ordenado que sabía el argumento de memoria. En esos minutos la dupla de volantes centrales funcionó a la perfección mientras arriba trataban de hacerse un huequito para gritar el primero. En tanto que en el fondo los tres pilares sacaron todo y se encargaron de ahogar a un Salgueiro que se empecinaba en arruinar el festejo.
Centro desde la derecha, despeje, Fredes que la mete de cabeza para Galeano, el pibe que con otro cabezazo la clava como puñal al medio y por detrás de todos apareció Facundo Parra para con un frentazo hacer delirar a más de treinta y cinco mil personas.
Por el tema del gol de visitante había calma en la gente y cuando parecía que el Rojo se iba tranquilo al descanso el maldito Salgueiro clavó un zapatazo al ángulo, inalcanzable para el gran Hilario, y una catarata apagó de un saque al Libertadores. Miradas para los costados, más angustia, temores, fantasmas y todos se preparaban para sufrir el complemento. Todos, menos Urrutia, quien quiso hacer una de lujo y le dejó la pelota servida a Fredes que con un zurdazo a los 35 segundos volvió a encender la caldera.
Hernán, el eterno resistido, el dueño del murmullo, de las críticas (obvio me hago cargo)ese del recordado golazo a Defensor fue el que se vistió de héroe. Y no solo por el gol, sino porque también jugó, hizo jugar, se rompió el lomo y además tuvo margen para tirar lujos.
El reloj corrió, inexorable, y Liga tuvo su oportunidad pero el Diablo metió la cola. En realidad metió un palo, en el que se estrelló el remate de Gámez a lo 38 que hubiera significado el adiós del sueño. Sí, también se ligo, pero a quién le importa. El Rey está a dos pasos de una nueva copa, los súbditos van a dejar la vida.
Fuente : Rojonews
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